¡CONFIÉSALO!

POR MANUEL MOGROÑEDA

¿Haz sentido ansiedad, angustia, temores, pero no le has podido contar a nadie porque piensas que te van a juzgar y señalar? O quizás, ¿estás en una posición de liderazgo y piensas que por exponer tus sentimientos o algún pecado te verán cómo alguien débil o inferior?

Esto es muy común en estos días. Hace cinco años yo salí de la adicción a las drogas y en este proceso sentía que no había nadie que me entienda. Como cristianos hemos vivido situaciones en las que no podemos encontrar a alguien maduro o confiable para compartir las cargas.

Pero te tengo una noticia. En mi proceso comprendí que no podía vivir así, que debía sanar mi vida espiritual y alinearme al diseño de Dios. Y en el camino encontré a alguien que si me entendía, y en mis días mas oscuros pude confesarle todo mi pecado y dolor. Esa persona es Jesús, el único que puede darnos consuelo y paz verdadera.

Él siendo Dios, pero estando en su naturaleza humana atravesó angustias y dolores, pero no le importo mostrar su vulnerabilidad.

La biblia, en Mateo 26:36-44 nos enseña dos principios bíblicos importantes:

1. Jesús acude al Padre para hablar de su profunda tristeza y confesar lo que sentía.

2. Jesús tenía en ese momento a Pedro, Santiago y Juan y les confesó que tenía el alma destrozada.

Jesús mostró su vulnerabilidad sin máscaras, sin filtros; no quiso verse demasiado espiritual e inalcanzable. Él nos muestra que esto no tiene nada de malo y que, mas bien es un gesto de valentía porque Su palabra dice: bienaventurados los pobres en espíritu porque de ellos es el Reino de los cielos.

Que tu vulnerabilidad ante Jesús no te dé miedo, Él está con los brazos abiertos para abrazarte en tu proceso y si te dejas rendir ante Su amor te puedo asegurar que sentirás un alivio y ya no estarás llevando esa carga en solitario.

Si estás luchando con un pecado, como yo lo estuve, aplica estos dos principios. Dios no quiere que pelees tus batallas solo. Él está con nosotros, somos Su iglesia, el cuerpo de Cristo, una familia que se sostiene y ayuda mutuamente.

Te animo a que puedas confiar en Dios y en las personas que Él ha puesto, confesar tus temores y pecados y así vivir una vida en liberta y plenitud.

ORACIÓN:

Gracias Señor porque en Ti encuentro amor y paz, porque a pesar de mis errores Tú me amas, porque quieres sanar mi corazón y que tenga una vida en intimidad contigo, ayúdame a acercarme a Ti, sin máscaras ni filtros y ser renovado a través de tu Santo Espíritu. Amén.

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